Disponer de un estudio funcional hará su experiencia mucho más placentera y le permitirá cerrar la puerta y olvidarse de su obra si en algún momento se desespera. Un garaje, desván, sótano, trastero o almacén fuera de su uso se pueden transformar y equipar a tal fin.
Las necesidades básicas son una buena iluminación, espacio suficiente para herramientas y obras terminadas y un amplio entorno de trabajo, además de acceso al agua corriente para el trabajo y la limpieza.
Es fundamental mantener el estudio ordenado. Las herramientas y enseres se deben de clasificar en cajones o armarios, y hay que tenerlos siempre en el mismo sitio para encontrarlos en cuanto los necesites. Los diversos tipos de materiales se deben de guardar por separado, por ejemplo, la arcilla tiene que estar lejos de áridos o de escayola, que tiene que mantenerse en lugar seco, mientras que la arcilla debe contener la humedad
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